Tus dudas son mis dudas

Pues mientras trabajo en eso de ponerle música a la cabaña (evidentemente yo no tg ni idea de cómo hacerlo, pero quizás pueda averiguarlo) me da por felicitar al gitano jefe de la cabaña.... ¡¡¡ya vuelves a contar para la sociedad!!! Ahora tines un trabajo, un sueldo, cotizarás a la seguridad social y empezarás a entrar en los planes de esos bancos que pronto llamará a tu puerta para que pilles la hipoteca... Suerte que la cabaña nos la hacemos nosotros mismos y si la acabamos algún día no tendremos que pdir ningún crédito... lo del ciber espacio es lo que tiene.

Eso majete, que enhorabuena!!! cómo me alegro!!!!

Oye, ahora sólo tienes que guardar 140 eurillos de nada para pisar el asfalto frente al escenario verde...

Te informo, majo, de que yo tb estoy intentando darle un giro de al menos 45º a mi devenir laboral, pero poco a poco no vaya a ser que me atragante.


Seguimos construyendo!


P.D.- Propongo una reflxión para amueblar la cabaña: ¿en que se puede pensar cuando alguien te pide que no pienses en nada?

Este blog ya me recuerda a aquel terrible libro que nos obligó a leer Don Catela, ya mencionado anteriormente en la cabaña, "En qué creen los que no creen?" pregunta-respuesta de Umberto Eco y el Cardenal Martini, ¿recuedas? dios que mal!!!